A veces duele dejar atrás ciertas cosas.
Aunque esas cosas no te hagan bien, pero son parte de el ser vos de todos los días.
En realidad creo que lo que duele esas veces es darse cuenta de que uno cambia. 
Y que tenemos que vivir con esos cambios, aunque éstos signifiquen madurar, y madurar cuesta.
Pero otras veces cambiar no significa necesariamente madurar. 
A veces significa afirmarse en uno.
Y ahí la cosa cambia.
¿Cómo es posible que factores que a uno lo ligan a ciertas personas, amplificados, pueden apartarlas de tallo?
Y sobre todo ¿por qué ocurre esto?
No encuentro respuesta todavía.
Parte de mi ser siempre fue un cierto círculo de personas, que pareciera que ya no me interesa que me rodee.
¿Por qué?
¡ Y yo qué voy a saber ! 
De la nada fui cambiando, fui encontrando esas cosas que captaron mi interés, y encontrando personas que los compartían.
Lo que no quiere decir que tenga que alejarme del resto de las personas.
Pero se alejaron de mí, y no viceversa. 
¿Por qué?
¡ Y yo qué voy a saber ! 
La distancia no siempre es algo que tiene un origen definido.
Muchas veces es algo que se da, más bien de procedencia ambigua y vaga, que simplemente pasa.
Ahora bien, ¿me interesa que pase o no?
Obviamente quiero recomponer las cosas con aquellas personas que me acompañaron siempre.
¿Pero y si eso implica seguir remando relaciones cuyas personas tienen poco y nada en común?
A veces duele dejar atrás ciertas cosas.
O a veces duele más aún saber que no pudimos ni siquiera dejarlas atrás, sino que se nos fueron solas.
¿Por qué sucede?
No encuentro un motivo definido.
Como tampoco se lo encuentro a la vida, ni a que en esta reflexión corta que carga muchísimo dolor, no haya puntos seguidos, solo puntos aparte.
Me parece que tiene que ver con que cada párrafo es una lágrima que cae sobre el teclado, así, sola y separada del resto, pero que abajo forman un mismo llanto. 
¿Y qué pasa cuando las lágrimas se meten muy profundo en el teclado, donde ya no se pueden secar?
Forman un cortocircuito, y el que no sabe reaccionar, hace boludeces.